Uno de cada dos estadounidenses tiene dudas sobre el informe del gobierno

En 2008, un sondeo internacional mostró que 54% de los encuestados cree que otros que no eran al-Qaida fueron los responsables. [1]
Ahora en el 12 aniversario una nueva encuesta realizada en septiembre de 2013 de la firma YouGov encontró que uno de cada dos estadounidenses tiene dudas sobre el informe del gobierno del 9/11.[2]

El informe de la Comisión 9/11 pretendía zanjar la cuestión de las circunstancias que rodearon los ataques, como respuesta a las demandas de los familiares de las víctimas.
En realidad aportó mas leña al fuego.
Incluso el vicepresidente de la Comisión, Lee Hamilton escribió un artículo en el New York Times en el 2008 que describe cómo la CIA obstruyó las investigaciones, destruyó pruebas y no pudo responder a las solicitudes legales de la Comisión de información.

Todo lo que siempre quisiste saber acerca de la teoría conspiratoria del 9/11

El Video “11S - una teoría de la conspiración” excelentemente realizado por James Corbett presenta en solo 5 minutos la mayoría de los elementos de la hipótesis ortodoxa. Además es divertido ya que se basa solo en las absurdas afirmaciones oficiales y riguroso, dando sus enlaces en la trascripción adjunta.[3] Lo incluimos en este boletín.
Los argumentos que invalidan la versión oficial son de todo tipo e incluyen los económicos.

Allen M. Poteshman de la Universidad de Illinois ha señalado la compra sin precedentes de opciones (put options) de American Airlines y United Airlines durante los días previos al 9/11, indicando conocimiento previo y privilegiado.[4]
El informe oficial también oculta otros hechos francamente incómodos.

Foto: Laurent Guyénot

En un excelente artículo muy bien documentado “11 de septiembre: ¿Una operación interna o una operación del Mosad?” [5]Laurent Guyénot,  ingeniero de la Escuela Nacional de Alta Tecnología e historiador,da ejemplos de ellos como los relacionados con otras ganancias colaterales al atentado que también apuntan en el mismo sentido.
En la torre norte el avión Boeing destruyó las plantas 93 al piso 99 ocupadas por la compañía Marsh & McLennan, una compañía internacional de seguros que era la reaseguradora [en caso de catástrofe] de las torres gemelas, hasta unos meses antes en que oportunamente transfirieron esa responsabilidad a otras.
El Director ejecutivo de Marsh & McLennan era entonces Jeffrey Greenberg, miembro de una multimillonaria familia judía que financió la campaña presidencial de George W. Bush.
También unos meses antes su Consejo de Administración incluyó a Paul Bremer [6], que era presidente de la National Commission on Terrorism (Comisión Nacional contra el Terrorismo) el 11/S y luego máxima autoridad en Irak tras la invasión.
Los afortunados beneficiarios de la catástrofe eran los titulares del contrato de alquiler de las Torres Gemelas del World Trade Center (WTC) y de los locales adyacentes, 2 personas:

Foto: El suertudo Larry Silverstein con su hija

- Larry Silverstein, destacado miembro de la Jewish Appeal Federation of Jewish Philanthropies of New York (asociación de judíos de Nueva York), amigo íntimo de Ariel Sharon [y de Benjamin Netanyahu]. Larry fue un suertudo doble ya que ese día no fue a desayunar a las torres como siempre hacía, su hija tampoco fue al trabajo y su hijo llegó tarde.
- Frank Lowy, sionista «filántropo» cercano a Ehud Barak y Ehud Olmert, antiguo miembro de la Haganh organización paramilitar judía.

Foto: Larry Silverstein jugando con sus torrecitas y sus amigos.

Además el que les hizo el contrato (y privatizó el WTC) solo unos meses antes era Lewis Eisenberg jefe de la New York Port Authority, miembro de la United Jewish Appeal Federation y ex vice presidente de movimiento sionista AIPAC. [7]
Otras compañías israelíes también estuvieron entre los suertudos como Zim Israel Navigational. Laurent Guyénot explica que se trata de “una empresa gigante especializada en el transporte marítimo, controlado al 48% por el estado de Israel (empresa conocida por servir ocasionalmente como tapadera a los servicios secretos israelíes), y cuya sucursal en los Estados Unidos se encontraba en las torres gemelas del WTC”. Pero «como por una bendición de Dios» sus 200 empleados las abandonaron una semana antes [8] y esta compañía no fue la única...
Como puedes ver, se trata solo de “meras coincidencias”...

Foto: Aeropuerto de Dulles

Como también debe ser coincidencia que 300 cámaras de seguridad en el Aeropuerto de Dulles no pudieran capturar una sola maldita imagen de los secuestradores del 11 S que supuestamente abordaron el vuelo 77.
“Había alrededor de 300 cámaras de seguridad en el Aeropuerto Internacional de Dulles el 11 de setiembre de 2001, que retuvieron sus imágenes por 30 días, siendo meticulosamente examinadas por sistemas de información computarizados y monitoreados por agentes federales. El gobierno de los Estados Unidos no liberó un solo video o imagen de estas 300 cámaras de seguridad”.[9]
Laurent Guyénot también da algunos datos importantes que pueden explicar este hecho. “Los dos aeropuertos de donde despegaron los vuelos AA11, UA175 y UA93 que se estrellaron en las torres gemelas (Aeropuerto Logan en Boston y el aeropuerto de Newark Liberty, cerca de Nueva York) relegan la seguridad del aeropuerto a un subcontratista de una agencia de servicios de seguridad llamada International Consultants on Targeted Security (ICTS), una empresa cuyos fondos y capital invertido en su creación son israelíes, el presidente de la empresa era Menachem Atzmon, un tesorero del Likud [partido de extrema derecha en Israel].”

Lo mismo sucedió con las cintas de vídeo todavía mucho mas numerosas del Pentágono (y de los hoteles y gasolineras circundantes.) que tuvieron que haber filmado al avión que lo impactó según la versión oficial. Las cintas nunca se hicieron públicas (menos una años después en la que no se ve ningún avión). El avión milagrosamente desapareció en el edificio sin dejar rastro como muestran claramente las evidencias gráficas disponibles. De nuevo la versión oficial desafía el más elemental sentido común y ha sido denunciada por asociaciones de pilotos, miembros de los servicios de inteligencia USA y militares.[10]

Foto: Juega a encontrar el avión en esta primera foto tras el impacto en el Pentágono

Los reportajes en video suprimido

Al menos dos reportajes que publicamos anteriormente han sido suprimidos. Aquí tienes nuevos enlaces para que los puedas ver.

Puedes ver un resumen rápido del atentado al Pentágono en la animación siguiente[11] que nos borraron del Boletín nº389[12].

Animación de la red Voltaire
«Objetivo Pentágono» Animación flash pentágono.

http://www.voltairenet.org/IMG/swf/es-pentagon_sp-2.swf

El reportaje Zero: una investigación sobre el 11-S fue suprimido de Vimeo.
El enlace en Vimeo donde podías  descargarte el excelente documental Zero a tu ordenador http://vimeo.com/7071817 fue suprimido.

http://www.youtube.com/watch?v=_sMQm1BYzfo

Zero: una investigación sobre el 11-S, es un magnífico documental de investigación, dirigido por Franco Fracassi y Francesco Trento, en el año 2008.
Se trata del primer documental, de larga duración, doblado íntegramente al español. En él participan, entre otros, el Premio Nobel de Literatura, Dario Fo, y el ex parlamentario europeo por Italia, Giulietto Chiesa.
Mientras en España y otros países pertenecientes a la Alianza Atlántica, éste y otros documentales, que cuestionan la versión oficial del 11-S, han sido totalmente ignorados o boicoteados por los grandes medios de comunicación, en Rusia y Venezuela han sido emitidos por la televisión pública, en horarios de máxima audiencia Boletín199:[13]. Una prueba más de la dictadura mediática y del déficit democrático que padecemos en los países occidentales. [14]

La censura incapaz de acallar las pruebas

Sin duda las pruebas físicas de la falsedad del informe oficial que han ido acumulándose, son las mas poderosas e incuestionables.
Como las presentadas en un estudio científico revisado por pares (peer-reviewed) por la revista abierta de física química Open Chemical Physics Journal en 2009, que confirmó la presencia de fragmentos de supertermita (un explosivo super potente de uso militar) presentes en las muestras de polvo producidas por la destrucción del World Trade Centre.
Boletín235[15]Boletín250.[16]

Foto: el físico Steven E. Jones

Esto se añadió a la evidencia de que el informe oficial del NIST presentaba numerosos agujeros en sus supuestas “pruebas” científicas. Empezando por no explicar hechos que desafían las leyes de la física, como la caída libre y la pulverización de los edificios, la imposibilidad de que el acero fundido encontrado en las bases de los edificios y en las vigas cortadas se hubiera derretido por el fuego del keroseno, etc. El polvo de supertermita encontrado y analizado es el elemento que remata la hipótesis de que las torres fueron objeto de una demolición controlada sostenida entre otros por Steven E. Jones del Departamento de Física Brigham Young University. Boletín197 [17]
Ambos hechos (y otros) implican que obviamente ya estaba preparada con mucha antelación al 11/S.
Las evidencias científicas han movilizado en especial a organizaciones profesionales entre las que destacaré algunas.

La de Ingenieros y Arquitectos por la verdad del 11-S que ya presentamos hace años y que ha seguido creciendo agrupando a más de dos mil arquitectos e ingenieros.

- También Consenso para el 11 S que ya presentamos[18] es una  importante asociación cuya calidad de investigaciones incluso ha sido reconocida por la revista super oficial Foreing Policy.
"La gran diversidad de conocimientos y experiencia de los panelistas y la metodología utilizada, dan este Panel de Consenso 911 un alto grado de distinción, integridad, autoridad y credibilidad. Esto ofrece a los medios de comunicación oportunidad confiable para promover una discusión seria, incluso desafiar la narrativa oficial acerca de este evento." [19]
Otros medios de masas no han tenido mas remedio que publicar artículos del 11 S citando la investigación de Consenso que contradice sus propios artículos publicados previamente [20] :

• The Wall Street Journal’s MarketWatch: The 9/11 Hijackers: Fraud in Official Video Exhibits Uncovered by Expert Panel
• The Boston Globe’s financial paper: The 9/11 Hijackers: Fraud in Official Video Exhibits Uncovered by Expert Panel
• Baltimore Business Journal: The 9/11 Hijackers: Fraud in Official Video Exhibits Uncovered by Expert Panel
• Canada Newswire: The 9/11 Hijackers: Fraud in Official Video Exhibits Uncovered by Expert Panel
• The Houston Chronicle: The 9/11 Hijackers: Fraud in Official Video Exhibits Uncovered by Expert Panel
• KING-TV NBC-5 Seattle: The 9/11 Hijackers: Fraud in Official Video Exhibits Uncovered by Expert Panel
• L.A. Biz: The 9/11 Hijackers: Fraud in Official Video Exhibits Uncovered by Expert Panel
• Morningstar: The 9/11 Hijackers: Fraud in Official Video Exhibits Uncovered by Expert Panel
• Newsday: The 9/11 Hijackers: Fraud in Official Video Exhibits Uncovered by Expert Panel
• E incluso la Agencia Reuters: The 9/11 Hijackers: Fraud in Official Video Exhibits Uncovered by Expert Panel

En Europa la Revista Francesa, Nexus, incluye un artículo de 12 páginas con un sumario de los 28 Puntos del Panel de Consenso para el 9/11 elaborados a la fecha. Incluye una cobertura del Colapso de la Torre 7 del WTC, y una encuesta nacional organizada por la “Asociación Francesa para la Reapertura del  9/11” en ocasión del Décimo Aniversario de los eventos. El artículo fue escrito por el Periodista Kim-Anh Lim y se titula “11/9, Un Caso Cerrado?” [21]
Nexus se vende en quioscos de revistas en Francia y está disponible en las salas de prensa de todo el mundo y el artículo se puede obtener directamente [22]  o en archivo en PDF [23]
No conozco ningún medio de masas en España que se haya atrevido a hacerlo.
Si tu conoces alguno, envíame copia y enlace para que lo citemos.
El panel selecto de expertos de Consenso “construyen el cuerpo de la evidencia basándose en su investigación de los eventos del 11 de Setiembre de 2001. Dicha evidencia deviene de un proceso de revisión acorde a parámetros científicos estándar y está abierta a toda otra investigación a emprenderse por parte del público, medios, academias o cualquier otro organismo o institución de investigación. El Panel regularmente publica en su Página de Inicio fragmentos extraídos de los Puntos de Consenso, con enlaces de apoyo documental.” [24]

En este boletín hemos seleccionado un artículo de uno de sus fundadores; Giulietto Chiesa donde demuestra documentadamente que las llamadas telefónicas supuestamente realizadas por los pasajeros desde los aviones secuestrados, utilizadas como pruebas, nunca existieron.[25]

Foto: 2 haces de rayos laser en NY en la Zona Cero

La asociación ReThink911,[26]ha recaudado fondos suficientes para emprender acciones mediáticas masivas como colocar tres haces de rayos láser en NY (normalmente hay 2) en recuerdo de las tres torres que fueron derrumbadas ese día, contratar anuncios en la televisión y poner un cartel en Times Square, animando a la gente a "repensar" la versión oficial sobre los acontecimientos del 911.

VIDEO OFICIAL de Repensar el 11 S. (ReThink911)[27]
http://www.youtube.com/watch?v=rNR6Kbg5jJ8

VIDEO Colapso de la tercera torre el edificio 7 en 30 segundos.[28]
http://www.youtube.com/watch?v=Mamvq7LWqRU

Como hace un buen estratega se han centrado en uno de los puntos más débiles de la teoría oficial. El derrumbe del tercer rascacielos en el WTC de 47 plantas que no fue impactado por ningún avión. "La destrucción de la séptima torre parece el resultado de una explosión controlada. Esta tecnología requiere una preparación durante semanas y solo puede ser implementada según un escenario planeado de antemano", aseguró el video publicado por la organización. Como era de esperar los medios han omitido esta información que si ha dado el canal de noticias ruso RT.[29]

Cuestionamiento de la hipótesis oficial en el ejército USA

Es alentador que la misma desconfianza que se está dando en el público [30] norteamericano también se de en el ejército e incluso en mayor medida. Incluyendo acusaciones de la participación de los servicios de inteligencia israelíes y la complicidad dentro del gobierno estadounidense.
¿Dirás que es propaganda conspiranoica?
No.

Foto: veterans today

La denuncia proviene de Alan Sabrosky, ex profesor de la Escuela Superior de Guerra del Ejército de EE.UU. y de la Academia Militar de EE.UU., que ha declarado que el 11 de septiembre es un «clásico orquestado por el Mosad» y encima lo ha hecho en revistas militares norteamericanas como Veterans Today.

“La voz de Alan Sabrosky suena, repercute y se transmite con fuerza dentro de los círculos de los veteranos del Ejército de EE.UU., quienes están asqueados por las infames guerras a las cuales se ven implicados y deben cumplir, todo esto a causa de una mentira, la mentira del 11 de septiembre o como fueron también las armas de destrucción masiva de Saddam Hussein, otra mentira más”.[31]
Actualmente esa oposición se manifiesta también en el Pentágono ante los planes de los políticos de atacar a Siria. Un factor ocultado pero nada despreciable, del cambio de rumbo de la administración Obama.
Así que estamos lejos del pequeño grupo de adeptos a las teorías de la conspiración con el que los medios de desinformación masiva y sus aliados en los medios “alternativos”, incluyendo a los supuestamente de “izquierda”, pretendieron etiquetar a los que dudaban de la versión ortodoxa. Puedes identificarlos fácilmente por sus omisiones y sus mentiras. Hoy deben estarse revolviendo en las tumbas que ellos mismos cavaron.
Queda cada vez más en evidencia y para mas gente que la auténtica teoría de la conspiración es la hipótesis oficial.

¿Quién inventó las falsas llamadas telefónicas desde los aviones secuestrados el 11 de Septiembre?

Giulietto Chiesa

Las llamadas telefónicas supuestamente realizadas por los pasajeros desde los aviones secuestrados el 11 de septiembre de 2001 influyeron profundamente en el imaginario colectivo. Pero sirven además de base al relato sobre cómo se desarrollaron los hechos. Sin embargo, 12 años después, los expertos del 9/11 Consensus Panel han demostrado que esas llamados nunca existieron.

Conforme a lo prometido, sigo informando a nuestros lectores sobre el desarrollo y avance de los trabajos del 9/11 Consensus Panel,* en el que yo mismo figuro como miembro. Aprovecho por demás la ocasión para señalar la incorporación de dos nuevos miembros: Jonathan Cole, ingeniero civil, y Daniel Ganser, historiador, director del SIPER (Swiss Institute for Peace and Energy Research) y también profesor de la universidad de Saint-Gall y en la universidad de Basilea.

El Panel se interesó esta vez por el extraordinario y extremadamente singular caso de las llamadas telefónicas realizadas desde 3 de los 4 aviones secuestrados en aquella trágica mañana. El meticuloso análisis de todas esas llamadas telefónicas permitió al Panel identificar no menos de 32 contradicciones, algunas de ellas imposibles de resolver, entre el relato proporcionado por las autoridades (que no han parado de contradecirse) y las pruebas documentales disponibles.

Comencemos por recordar que durante 3 años, desde 2001 hasta 2004, las historias sobre las llamadas realizadas desde los aviones a través de teléfonos celulares han predominado en los recuentos publicados por los medios de prensa de Estados Unidos y del mundo entero. Han alimentado miles de artículos, libros y relatos. Esas llamadas son parte integrante de la historia del 11 de septiembre y nunca han sido verdaderamente cuestionadas. Incluso se hizo una película, sobre el vuelo UA 93, enteramente basada en algunas de esas llamadas telefónicas. Tanto el FBI como el tristemente célebre Informe de la Comisión sobre el 11/9, presentado en 2004, afirman oficialmente que se hicieron llamadas con teléfonos celulares desde 3 de los 4 aviones secuestrados. Dado que la credibilidad del Informe de la Comisión sobre el 11/9 se basa parcialmente en esos relatos, es evidente que si tales llamadas telefónicas dejan de ser creíbles el informe también deja de serlo. Así que el 9/11 Consensus Panel se dio precisamente a la tarea de verificar esa parte de la historia.

No alcanzaría el espacio aquí para retomar todos los detalles de las llamadas (Todd Beamer desde el vuelo UA 93; Barbara Olson desde el AA 77; Peter Hanson desde el UA 175; Jeremy Glick y Mark Bingham desde el UA 93; Renee May, aeromoza del vuelo AA 77; Brian Sweeney desde el UA 175; Thomas E. Burnett y sus 4 llamadas desde el vuelo UA 93; Sandra Bradshaw, aeromoza del vuelo UA 93; Elizabeth Wainio y Mario Britton desde el UA 93), un total de 35 llamadas telefónicas. Sólo me detendré aquí en dos protagonistas de esas llamadas telefónicas. Los lectores deseosos verificar las fuentes de nuestras conclusiones pueden hacerlo consultando el sitio web consensus911.org. http://www.consensus911.org/es/

El primero es Todd Beamer, quien –según la historia contada por los medios de prensa– lanzó la famosa frase «Let’s Roll!», grito de guerra que supuestamente dio inicio a la rebelión de los pasajeros del vuelo UA 93. Según Lisa Jefferson, la operadora telefónica que recibió la llamada, Beamer le pareció asombrosamente sereno, dadas las circunstancias. Tanto que la señora Jefferson declaró al FBI que pensó por un momento que se trataba de una llamada falsa (crank call), sobre todo por el carácter tan «metódico y racional» de su interlocutor en una situación en la que se hallaba «a punto de morir». La llamada duró unos 13 minutos, algo relativamente singular ya que en aquellas condiciones excepcionales y dado el enorme número de llamadas recibidas en las centrales [aquella mañana] las comunicaciones eran a menudo cortadas. Pero lo más extraño –también según el testimonio de Lisa Jefferson al FBI– es que la línea telefónica se mantuvo conectada durante 15 minutos después de haberse estrellado el avión. Hay que agregar que Beamer se mantuvo hablando por teléfono por no menos de 13 minutos con 2 operadoras diferentes y cuando Jefferson le propuso comunicarlo con su mujer –Lisa, embarazada de su tercer hijo que debía nacer en enero– [Beamer] le contestó: «No, no. No quiero preocuparla sin razón.» Y después agregó: «Sólo quiero hablar con alguien para que sepa lo que está pasando aquí», como si no tuviese ningún amigo o pariente con quien hablar.

La otra operadora, Phyllis Johnson, no parece haber sido interrogada por el FBI y no existe finalmente ningún elemento que permita comprobar con certeza que la persona que habló con las dos operadoras era realmente Todd Beamer. La llamada no fue grabada, ni por las dos operadoras ni por el AOSC (Airphone Operations Surveillance Center). ¿Qué se puede deducir de todo esto? Las interrogantes son innumerables. Pero agregaré ahora otra más, que me parece más decisiva aún que todas las mencionadas hasta este momento. El 29 de septiembre de 2001, Verizon (el operador telefónico del teléfono celular de Beamer) entregó al FBI la lista detallada de las llamadas, que demuestra que desde ese teléfono se hicieron 18 llamadas después (así mismo, después) del estrellamiento del vuelo UA 93, o sea después de las 10:03 horas de la mañana del 11 de septiembre de 2001. ¿Qué podemos deducir de ello? La hipótesis más plausible es aquel teléfono celular no estaba a bordo del vuelo UA 93 con Todd Beamer… o que el avión que se estrelló en Pennsylvania no era el vuelo UA 93.

Ante toda esta serie de preguntas sin respuestas, el FBI no tuvo más remedio que recurrir (basándose ya únicamente en la fe del juramento) a una nueva versión. Lo cual sucedió en 2006, durante el juicio contra Zacarias Mussawi. El FBI dijo entonces que ninguna de las llamadas, con excepción de 2, habían sido realizadas con teléfonos celulares y que las 2 únicas llamadas realizadas con ese tipo de aparatos se habían producido simultáneamente, a las 9 horas 58 minutos, desde el vuelo UA 93, realizadas por 2 miembros de la tripulación, E. Felt y Cee Cee Lyle. Las 2 llamadas fueron [según el FBI] realizadas desde los baños del avión en momentos en que este volaba a 5 000 pies de altitud (unos 1 500 metros), o sea desde una altura relativamente compatible con las posibilidades técnicas de las comunicaciones telefónicas celulares en 2001.

Pero hay otro problema. Esas 2 llamadas tampoco pueden haberse realizado con teléfonos celulares. A pesar del profundo examen al que fue sometida la lista de llamadas de los celulares de todos los pasajeros y miembros de la tripulación de ese vuelo, no se encontró el menor indicio de una llamada realizada a la 9 horas y 58 minutos, ni ninguna especificación de la duración de tales llamadas, ni por lo tanto ninguna huella de los números supuestamente llamados.

Conclusión: Todas las historias que mencionan llamadas realizadas con teléfonos celulares desde los aviones son falsas. Esas llamadas nunca existieron.

Pero veamos las llamadas telefónicas más sensaciones (en el sentido de que causaron sensación en el mundo entero, provocando así gran emoción): las llamadas de Bárbara Olson, célebre presentadora de la CNN, que se hallaba a bordo del vuelo AA 77. Según el testimonio de su marido, Theodore Olson (no olvidemos que este último era entonces secretario de Justicia de Estados Unidos), Bárbara lo llamó 2 veces, casi una hora antes de que el avión se estrellara contra el Pentágono. CNN fue el primer medio en anunciarlo. Ted Olson fue muy claro: su mujer lo había llamado a través de su teléfono celular…

Hay que señalar que las llamadas de Bárbara Olson son las únicas que hacen referencia al armamento de los terroristas (cortapapeles) y que las revelaciones de Ted Olson fueron por lo tanto cruciales en la reconstrucción de los hechos. Incluso puede decirse que ese relato constituye uno de los pilares de la versión oficial. El problema es que, posteriormente, Ted Olson cambió de versión varias veces. La versión del FBI señala, sin embargo, que la primera llamada duró «alrededor de un minuto». En el Larry King Show, Olson declara también que la segunda llamada había durado «dos, tres, quizás cuatro minutos».

Hay al menos 4 problemas que ponen en duda lo que cuenta Ted Olson. El primero viene del propio FBI, que declaró firmemente en 2004: «Todas las llamadas [realizadas] desde el vuelo AA 77 se hicieron a través del sistema telefónico del avión.» Entonces, ¿mintió Olson?

Desgraciadamente, el FBI también mintió. En 2006, un agente de American Airlines declaró (en el juicio contra Mussawi) «que ningún Boeing 757 disponía de teléfonos de asiento, incluso desde mucho antes del 11 de septiembre de 2001. Los pasajeros del vuelo AA 77 utilizaron sus teléfonos celulares.» Otro elemento viene a confirmar esa declaración. Se trata del manual de mantenimiento del Boeing 757, con fecha del 28 de enero de 2001: «El sistema telefónico para pasajeros fue desactivado en aplicación de la directiva Eco FO878.» Otros elementos confirman igualmente que no había en los aviones teléfonos para uso de los pasajeros.

Por muy asombroso que pueda parecer, el hecho es que no existe ningún elemento objetivo que permita demostrar la existencia de alguna llamada de Bárbara Olson aquella mañana. No existe del lado del operador telefónico, como tampoco existe del lado del propio Departamento de Justicia (donde se hallaba su marido), ni tampoco en los datos sobre el movimiento del teléfono celular de la periodista. Pero este enredo no para ahí. Un informe del FBI (hecho público durante el juicio contra Mussawi, en 2006) destruye definitivamente la historia de Tel Olson. Según ese informe, hubo una sola llamada (y no 2) proveniente de Bárbara y esa llamada duró… «0 segundos». En otras palabras, no se estableció la comunicación. Así que Bárbara no pudo describir nada.

Y todavía no hemos mencionado lo inverosímil de toda la historia, en la que 60 pasajeros, entre los que se hallaba uno llamado Charles Burlingame, levantador de pesas y ex boxeador, son rechazados hacia la cola del avión por dos secuestradores más bien enclenques (al menos según el relato de Ted Olson, quien a su vez decía lo que le había dicho su mujer) mientras que los otros dos secuestradores se mantenían encerrados en la cabina de pilotaje.

Conclusión: ¿Mintió Ted Olson? No se puede descartar que le hayan llegado llamadas provenientes de su mujer. Pero lo que consta en las actas judiciales hace pensar que tales llamadas no podían venir del vuelo AA 77.

Y, por lo tanto, toda reconstrucción está falseada. Alguien la inventó. Si realmente existieron tales llamadas telefónicas, el hecho es que no fueron realizadas desde los aviones. Y si no se hicieron desde los aviones, ¿quién las hizo? ¿Y con qué objetivo?

Cuando reclamamos que se haga una verdadera investigación, en la que se llame a declarar bajo juramento a todos los protagonistas aún vivos, estamos reclamando algo simplemente lógico y evidente. Pero lo evidente nunca se tiene en cuenta cuando se habla del 11 de septiembre. Así que tendremos que proseguir nuestra propia investigación.

Gulietto Chiesa

Giulietto Chiesa, periodista, fue corresponsal de El Manifesto y de Avvenimenti, colaboró con múltiples emisoras de radio y televisión en Italia, Suiza, el Reino Unido, Rusia y el Vaticano. Autor de diversos títulos, su trabajo se ha centrado en la disolución de la URSS y en el imperialismo estadounidense. Comprometido en la lucha contra la participación de Italia en la invasión a Irak. En 2004, fue electo miembro del Parlamento Europeo (alianza de demócratas y liberales).

Todo lo que siempre quisiste saber acerca de la teoría conspiratoria del 9/11 en unos 5 minutos

James Corbett

https://www.youtube.com/watch?v=VXVsWALNQZM

La teoría de la conspiración sobre lo sucedido el 11 de septiembre de 2001 en Nueva York que nos contaron instituciones oficiales y medios de comunicación relatada en 5 min sólo con datos oficiales cuyas fuentes puedes encontrar en la transcripción adjunta.

TRANSCRIPCION y fuentes:

En la mañana del 11 de Septiembre de 2001, 19 hombres armados con cutters, dirigidos por un hombre en diálisis en una cueva en el otro lado del mundo usando un teléfono por satélite y un portátil perpetraron la penetración más sofisticada del espacio aéreo mejor defendido del mundo, superando a los pasajeros y los pilotos con entrenamiento militar en combate de 4 aviones comerciales antes de apartarlos mucho de su curso durante más de una hora sin ser molestados por un solo caza.
Estos 19 secuestradores, devotos religiosos fundamentalistas que beben alcohol, esnifan cocaína y viven con strippers de pelo rosa, consiguieron derribar 3 edificios con dos aviones en Nueva York, mientras en Washington un piloto que no sabía manejar un Cessna de un solo motor logró maniobrar un 757 en una espiral descendiente de 8.000 pies y 270 grados para terminar a nivel exacto de suelo, impactando contra el Pentágono justo en la oficina del analista de presupuesto donde el Departamento de Defensa estaba trabajando en el misterio de los 2.3 billones de dólares que el Secretario de Defensa Donald Rumsfled había declarado “perdidos” de los cofres del Pentágono en una conferencia de prensa el día anterior, 10 de septiembre de 2001.

Afortunadamente, los presentadores de televisión supieron quién lo había hecho en minutos, los expertos en horas, la Administración a lo largo del día, y las pruebas cayeron literalmente en las manos del FBI. Pero por alguna razón un grupo de locos teóricos de la conspiración reclamaron una investigación sobre el mayor ataque en suelo americano de la historia.
La investigación fue retrasada, sub-financiada, predestinada a fallar, un conflicto de intereses y una tapadera de principio a fin. Fue basada en testimonios obtenidos bajo tortura, cuyos registros se destruyeron. No mencionó siquiera la existencia del edificio 7, Able Danger, Ptech, Sibel Edmonds, OBL y la CIA, y los entrenamientos de aviones secuestrados siendo estrellados contra edificios que estaban siendo simulados en el preciso momento en el que estaba realmente ocurriendo. En ella mintieron el Pentágono, la CIA, la Administración Bush y sobre Bush y Cheney… bueno, nadie sabe qué dijeron porque testificaron en secreto, extraoficialmente, no bajo juramento, y tras puertas cerradas. No se buscó quién financió los ataques porque esa cuestión es de “poca importancia práctica”. Aún así, la comisión sobre el 11S contestó brillantemente todas las preguntas del público (excepto la mayoría de las preguntas de los familiares de las víctimas), y asignó culpa en toda la gente responsable (aunque ninguno perdió siquiera su empleo), determinando que los ataques fueron un “fallo de imaginación”, porque “No creo que nadie pudiese haber previsto estrellar aviones contra edificios” excepto el Pentágono, la agencia de control de emergencias, NORAD y NRO.
DIA destruyó 2.5 TB de datos sobre Able Danger, pero no pasa nada porque seguro que no eran importantes.
SEC destruyó sus archivos de la investigación sobre tráfico de influencias antes de los ataques, pero no pasa nada porque destruir archivos de la mayor investigación de la historia del SEC es sólo trabajo de documentación rutinario.
El NIST ha clasificado los datos que usó para el modelo sobre el colapso del edificio 7, pero no pasa nada porque saber cómo hicieron ese modelo de colapso podría “poner en peligro la seguridad pública”.
El FBI ha argumentado que todo el material sobre su investigación del 11S debería guardarse en secreto, pero no pasa nada, porque seguramente el FBI no tiene nada que ocultar.
Este hombre nunca existió, y nada de lo que dijo merece tu atención, y si dices lo contrario eres un teórico de la conspiración paranoico y mereces ser rehuido por toda la humanidad. Lo mismo con él, él, él, y ella… (y ella, y ella, y él).
Osama Bin Laden vivió en una cueva-fortaleza en las colinas de Afganistán, pero de alguna manera escapó. Luego se escondió en Tora Bora, pero de alguna manera escapó. Luego vivió en Abottabad durante años, burlándose de la red de inteligencia más exhaustiva que usaba la tecnología más sofisticada del mundo durante 10 años, sacando vídeo tras vídeo con completa impunidad (y rejuveneciendo en el proceso), antes de que fuera finalmente encontrado en una audaz incursión de los SEAL que no fue grabada en vídeo, en la que no se resistió o usó a su mujer como escudo, y en la que los operativos de estas fuerzas de elite entraron en pánico y mataron a este hombre desarmado, supuestamente la mejor fuente de información del mundo sobre estos ruines terroristas. Luego echaron su cuerpo al mar antes de decírselo a nadie. Luego un par de docenas de miembros de ese equipo murieron en un accidente de helicóptero en Afganistán.
Esta es la historia del 11S, de la mano de los medios de comunicación que te contaron las verdades sobre “pudimos ver su cabeza moverse violentamente hacia delante” (JFK) y “sacaron a los bebés de sus incubadoras” y “unidades de producción móviles” y “el rescate de Jessica Lynch”.
Si tienes alguna pregunta sobre esta historia… eres un mierdoso, paranoide, gorroplata, mataperros, odia-bebés y serás denostado por todos. Si amas a tu país y/o la libertad, la felicidad, los arcoíris, el rock&roll, los cachorritos, la tarta de manzana y a tu abuela, nunca, jamás expresarás dudas sobre ninguna parte de esta historia a nadie. Jamás.
Este es un mensaje de servicio público de: Amigos del FBI, CIA, NSA, DIE, SEC, MSM, la Casa Blanca, NIST, y la comisión del 11S.
Porque la Ignorancia es Fuerza.